Todas las corridas tienen una historia y la de hoy en Aguascalientes no fue cuantitativa, pero sí de didáctica, el catedrático se llama Sebastián Castella. El capítulo es el del viernes 26 de abril cuando realizaron el paseíllo además del francés los diestros Leo Valadez y Diego San Román, al final de la tarde, aunque no hubo corte de orejas se vivieron momentos muy interesantes.
Sebastián Castella ha dejado claro que es un profesional en toda la palabra, ante el primero de su lote mostró porque es una figura del toreo, ello debido a que arrancó series de mucha valía que habían sido precedidos por un elegante toreo de capote. Al final del trasteo el diestro de Francia aguantó los parones del estado y aunque este se vino a menos dibujó estéticos adornos. Se tiró a matar con decisión, pero falló por lo que perdió el trofeo, a cambio una cariñosa ovación.
El cuarto de la tarde ha sido un astado que no dio opciones ya que carecía de fuerza, pero llegó una verdadera lección de como resolver esas circunstancias y a la vez agradar a los tendidos, sin aburrirse y metiendo en la canasta a su enemigo fue construyendo una faena en la que aparecieron el toreo de rodillas, los pases en redondo y los desplantes toreros.
Con un sentido didáctico, Castella atrajo la atención de un público que a su vez pudo observar la capacidad de hacer posible lo imposible. Cuando ya tenía la oreja en la espuerta volvieron los fallos con la espada por lo que sólo llegó algo sumamente importante que es el reconocimiento unánime de la gente.
Leó Valadez se presentó ante sus paisanos con un episodio muy cuesta arriba, por un lado. las airadas protestas del público hacía el burel y por otro la poca fuerza del mismo, discreción en los de recibo, quite por chicuelinas y sólo voluntad con la muleta. Fallas con el acero y leves palmas.
Con el quinto de la tarde el de Aguascalientes salió a tambor batiente y de salida ejecutó una larga pegado en tablas y un quite recordando al “Calesero”, acto seguido cubrió con voluntad el segundo tercio en donde por cierto invitó a Gustavo Campos que, dicho sea de paso. cuajó un soberbio par.
Durante su labor con la muleta comenzó con el toreo de rodillas en donde se dejó llegar los pitones casi hasta el pecho, llegaron tandas por ambos pitones que se caracterizaron por el sentido artístico, al transcurrir de la faena fue acortando las distancias hasta exponer el físico en demasía. Como sucedió en los seis toros pincho varias ocasiones por lo que perdió los trofeos. Palmas.
Diego San Román realizó su segunda comparecencia en la Monumental y al igual que ayer las cosas no se le han dado, con sus dos enemigos se ha observado una encomiable voluntad, exposición en las cercanías hasta poner los muslos como carnada, desafortunadamente y aunado al poco juego de su lote también se puso pesado con la espada. El reconocimiento del público y el recordatorio de “Lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible”.
FICHA:
Octava corrida de feria San Marcos 2024 ante casi tres cuartos se han lidiado astados de la ganadería de San Miguel de Mimiahuapam de presentación y juego desigual. Pesos: 500, 520, 494, 508, 532 y 540 kilos.
Sebastián Castella (carmesí y plata) ovación y ovación.
Leo Valadez (grana y azabache) silencio y palmas.
Diego San Román (obispo y oro) silencio en su lote
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