Por Alberto Lopera
Emilio de Justo cuaja una faena de Puerta Grande, pero sin la rúbrica de los aceros
Salió el sol después del diluvio de ayer y los tendidos de la plaza volvieron a cuajarse con un gran ambiente. El milagro de Manizales. Una faena de arrebato con Talavante, con varias series de rodillas en redondo, y el temple de Tomás Rufofueron los avales que los diestros presentaron en el ruedo para pasear sendas orejas. Buena tarde del toledano, en la que sólo el acero le impide un triunfo rotundo. Lo mismo le ocurrió a Emilio de Justo. El extremeño perdió con los aceros la Puerta Grande tras una faena al quinto, dentro de una corrida variada de Las Ventas del Espíritu Santo.
Ficha:
ALEJANDRO TALAVANTE, palmas y oreja.
EMILIO DE JUSTO, silencio y vuelta al ruedo tras petición.
TOMÁS RUFO, ovación tras aviso.
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